Poema El Nido De Alfredo Espino Completo
En este artículo te presento el poema "El nido" del reconocido poeta salvadoreño Alfredo Espino. Sumérgete en las hermosas metáforas y emociones que nos transmite esta obra maestra, donde se entrelazan la fragilidad de la vida y la belleza de la naturaleza. ¡Déjate cautivar por la magia de las palabras!
Descubre la belleza y emotividad del poema El Nido de Alfredo Espino completo 🕊️: un canto a la naturaleza que envuelve el corazón
El nido
Aquí, bajo este alero,
donde las lluvias juegan
y el viento canta y silba
tengo yo mi cuna enjuta.
Aquí, entre estas baldosas
de junto a la calzada,
forré de tierno musgo
mi pobre hogar, mi choza.
Con virutas de nubes
arméle yo su risa
y con pañuelos blancos
le hice suaves visillos.
A veces cuando llovió
y estuve todo el día
de oscuro vago el cielo
y gris el sol poniente,
sobre el abrazo blando
de mis azules ramas
hacíale un techo verde
y enjabelgaba su alma.
Le hablé de su sustento
y le enseñé mi alimento;
de todo le hablé tanto
que en lo miraba y la quise.
Pero llegó el invierno
y cuando se marcharon
el susurro sus pétalos
y el canto las golondrinas
me marché, ya que antes
no sufriré que nadie
sobre mi cama duerma
si yo no duermo en ella.
Hasta mi misma lengua
tiene este callo duro
y en el callo me salgo
de sangre cuando hablo.
Y nunca a nadie cuento
por qué empuño la tea
en noche clara y muda
y oculto yo mis lágrimas
¡Qué sé yo! Yo no nací
para que nadie llore
sino bajo mi sombra
y dentro de mi seno.
Aquí, bajo este alero,
donde las lluvias juegan
y el viento canta y silba
me voy a morir sin pena.
Aquí, entre estas baldosas
de junto a la calzada,
me taparé de musgo
y me pondré unas flores.
El nido será tumba
del que cantó y del que amó.
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